En los últimos años, los alimentos llamados “orgánicos” han adquirido una gran popularidad entre los consumidores, demostrando el interés de mucha gente por un cambio positivo en la alimentación, y sobre todo, la búsqueda de equilibrio del medio ambiente en que se producen.
Por esta razón, algunos países, entre ellos México, se han dado a la tarea de emitir leyes que regulen el uso de dichos alimentos, con la finalidad de dar al consumidor garantías de que el alimento que se vende como orgánico, realmente lo sea.?
El 01 de abril del 2010, se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Reglamento de la Ley de Productos Orgánicos, cuyo objeto es regular los requisitos y procedimientos que deberán cumplirse entre el comienzo de la producción y/o manejo orgánico y la Certificación Orgánica de los cultivos, ganadería u otra actividad agropecuaria. Asimismo se establece el proceso a través del cual los organismo de certificación acreditados y aprobados, constatarán que los sistemas de producción, manejo y procesamiento de productos orgánicos se ajusten a dichos requisitos.?
Asimismo, se regula el establecimiento de los criterios que los Operadores deben cumplir en cada fase de la cadena productiva para la obtención de productos orgánicos, para que se puedan denominar como tales en el mercado nacional y con fines de exportación, regulando los materiales, sustancias, productos, insumos, y métodos e ingredientes permitidos, restringidos y prohibidos en toda la cadena productiva.
Por último, se regula la instalación del Sistema de Control Nacional, a fin de que esté disponible a través de internet para consulta de cualquier persona interesada en tener la información relacionada con la producción orgánica del país, y así garantizar la integridad orgánica de los productos.